Visual merchandising: cómo distribuir el interior de tu comercio.I

Un visual merchandising eficaz comienza con una buena distribución de la planta del comercio. Valorar y definir las diferentes zonas es el primer paso para rentabilizar nuestro negocio. Si nuestro local no dispone de escaparate  reservaremos un lugar para este fin, a ser posible junto a  la puerta de entrada. Es recomendable dejar la puerta abierta para eliminar las barreras entre los transeúntes y el interior de la tienda. Dependiendo del producto a exponer variarán las medidas necesarias para el escaparate.

El lugar donde ubicar la caja dependerá principalmente de la forma y tamaño de la planta del local. Es importante que desde la caja se vea la totalidad de la tienda, sin dejar ángulos muertos. Si al entrar en una tienda, la tendencia es dirigirnos a la derecha, un buen lugar puede ser al fondo a la izquierda. Así favorecemos la circulación de la clientela por todo el comercio. A menudo nos encontramos las cajas a la entrada del local con el fin de evitar posibles hurtos. Para resguardar la zona de caja podemos colocarla detrás del escaparate o  si está en la cristalera usar un vinilo .

Si el comercio es textil necesitarás probadores. Elige un lugar apartado de la entrada en el que el público tenga intimidad. Así dispondrás de un espacio principal con múltiples posibilidades para el visual merchandising. Haz de tu probador un lugar acogedor. Detalles como una luz cálida agradable, disponer de colgadores, incluir una silla, una cortina que cierre por completo…son algunas de las claves.

Aunque no necesites probadores dispón de un lugar en la caja o en el almacén para guardar las posibles bolsas de la clientela. Te asegurarás que realicen sus compras cómodas y a gusto. En Bilbo nunca está de más un paragüero en la entrada para los días lluviosos.